Nuestro programa de Patrocinio de Niños se basa en un modelo integral de desarrollo infantil que busca abordar simultáneamente aspectos clave de la vida de un niño – espiritual, física, intelectual, emocional y relacional – a través de oportunidades de aprendizaje e intervenciones de desarrollo. A través de este modelo, los niños son animados a crecer como las personas que Dios creó que fueran.

A través del Programa de Patrocinio de Niños de MNC, los niños están inscritos en un programa de Desarrollo Integral Infantil que incluye lo siguiente:

• Desarrollo Espiritual: MNC se asocia con iglesias locales para ayudar a los niños a entender que Dios los ama, que han sido creados a la imagen de Dios, que son valiosos y tienen la dignidad que Dios les ha dado, y que pueden tener una relación personal con Jesucristo.

• Desarrollo Físico: Para asegurar un desarrollo físico y mental saludable, los niños reciben nutrición suplementaria, educación en higiene y atención médica preventiva.

• Desarrollo intelectual: Al proporcionar tutoría, educación formal y capacitación en habilidades para la vida, los programas de Desarrollo Infantil Integral ayudan a los niños a desarrollar sus mentes y a obtener oportunidades de empleo en el futuro que les ayudarán a interrumpir el ciclo de pobreza y los beneficiarán a lo largo de sus vidas.

• Desarrollo Emocional: Como resultado de la pobreza, el hambre, los desastres naturales, la guerra y la pandemia del VIH/SIDA, muchos niños viven con las cicatrices de traumas emocionales. Los programas de desarrollo integral infantil permiten que los niños se restauren y crezcan conectándolos con padrinos, consejeros y una familia de la iglesia local.

• Desarrollo Relacional: A través de los programas de Desarrollo Integral del Niño y la sabiduría y el amor de padrinos comprometidos y líderes locales, los niños aprenden a trabajar y jugar juntos, a construir relaciones duraderas y a amar a Dios y a los demás.

El modelo de Desarrollo Integral Infantil de MNC también reconoce la importancia de la familia y la comunidad en la vida de un niño, sabiendo que el mejor desarrollo infantil ocurre cuando los niños crecen en el contexto de una familia amorosa, saludable y empoderada. Estamos comprometidos a trabajar junto con las familias y las comunidades para ayudar a los niños a desarrollar el potencial que Dios les ha dado.